Ésta es probablemente la más pequeña de nuestras propiedades, pero es un pequeño refugio para parejas o viajeros solitarios y aprovecha el espacio de forma inteligente. La cocina compacta tiene una mesa y sillas para dos personas, y justo al lado hay un pequeño cuarto de baño con azulejos añiles. La cocina da paso a una sala de estar con suelos de baldosas de colores originales, una estufa de leña en el centro y dos sofás para reclinarse cómodamente. (Una puerta a la izquierda de la estufa comunica con el salón de la Casita del Medio). En el exterior, tiene su propia terraza cubierta y jardines sombreados al otro lado del camino, donde podrás pasar fácilmente la tarde en la hamaca.

El Estudio del Madroño, la Casa del Monte y la Casita del Medio pueden conectarse para formar una gran casa con capacidad para ocho personas.